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Revisión actual - 19:54 19 sep 2024
BIG-BANG (Los tres momentos de la creación): Se dan tres grandes momentos en la creación ex genética possibilitate: el big bang cósmico, el big bang biológico y la creación del espíritu humano.
El primer momento es el big-bang de la materia que, en su evolución, se abre a la vida orgánica o anímica.
El segundo momento es el big-bang de la vida que, en su evolución, se abre al espíritu.
El tercer y postrer momento es la libre creación del espíritu por el sujeto absoluto en la concepción biológica de todo ser humano.
Este espíritu asume en sí mismo, conscienciado, el precedente homínido con sus funciones síquicas y orgánicas; por ello, el espíritu humano no es un espíritu puro, sino un espíritu sicosomatizado . La persona humana participa, entonces, de los tres estadios de la vida, aunque hay que afirmar, con exactitud, que su naturaleza, formada de soma, sique y espíritu, solamente tiene una vida; esto es, está constituida por una vida espiritual o consciencial que asume, reduciendo a cero ontológico el precedente anímico y vegetativo, todo el específico de la vida síquica o subconsciencial, y también todo lo específico de la materia orgánica o inconsciencial. Esta transformación no debe concebirse como cambio de una forma en otra de tal modo que la primera es aniquilada por la segunda; no existe la aniquilación, sino la reducción a cero de una forma por otra forma para asumir el específico de la anterior, de tal modo que este específico pasa a ser de la forma asumente, pues la asumida ha quedado reducida a cero. En el caso de la persona humana, el espíritu es la forma asumente que hace suyo el específico de la sique y el específico del soma, reduciendo a cero la forma anímica y la forma estructural del cuerpo con el objeto de que el espíritu asuma lo síquico y lo somático.
El big-bang biológico da origen a la aparición y evolución de los organismos, comenzando por los unicelulares hasta concluir con el precedente homínido, que deja de serlo por creación e infusión en este del espíritu acompañado de la DIVINA PRESENCIA CONSTITUTIVA del absoluto. El big bang biológico podría haber consistido, dadas las condiciones determinadas, en una primigenia explosión genética que, mucho más tardía que la explosión cósmica, dio lugar a la evolución diferencial de los seres vivientes con exclusión del espíritu humano.
La creación del espíritu es un hecho presente que se produce en la concepción de cada ser humano dentro del actuar biológico de las sucesivas generaciones. La persona humana no está ya sujeta a evolución, sino a crecimiento y madurez biológica, al mismo tiempo que moral y espiritual en virtud de la gracia divina; el deterioro de la vida espiritual es causado sobre todo por el demérito moral que conlleva el pecado o la ofensa al Creador y la ruptura de la comunión con Él. (Véase creación)
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