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Revisión actual - 11:36 21 sep 2024
PERFECTIBILIDAD, Ley de la: Es una de las ESTRUCTURAS Y OPERADORES GENÉTICOS legislativos. Es una de las tres leyes del GENE ONTOLÓGICO O MÍSTICO, por la cual tendemos a lo más perfecto, a que nuestra inmanencia y transcendencia no sean de cualquier modo, sino con sentido de perfección .
La ley de la perfectibilidad hace, pues, la síntesis de la inmanencia y de la transcendencia: podemos entrar en nosotros mismos y salir de nosotros mismos no de cualquier manera, sino sensu perfectionis. Todo ser humano sabe distinguir, consciencialmente, lo que es más perfecto de lo que es menos perfecto. La confusión, o la pérdida de sensibilidad o de consciencia de lo más perfecto, son ajenas a dicha ley que poseemos, constitutivamente, todos los seres humanos.
Por la ley de la perfectibilidad tendemos siempre a lo más perfecto. Quiere decirse que no somos perfectos; esto es, somos finitos abiertos a la perfección, al INFINITO. El “+” en sucesivos “+” nos lleva, necesariamente, a adquirir experiencia de nuestra apertura al infinito, teniendo en cuenta que el infinito como término de ultimidad y de referencia es lo absolutamente perfecto. El hecho de que nosotros no seamos infinitos o absolutamente perfectos no es ninguna prueba para afirmar, indebidamente, que no existe el infinito o lo absolutamente perfecto. Por la ley de la perfectibilidad, posee la capacidad de concebir y de hacer todo con sentido de perfección en tal grado que tiende a la mejor forma de ser sí mismo (inmanenciación) y más allá de sí mismo (transcendentalización).
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