ORIGEN, Concepción genética del

ORIGEN, Concepción genética del: El origen y la réplica se refieren respectivamente al agente y al objeto: origen de la acción es el agente; réplica a la acción del agente es la acción receptiva del objeto (Véase ACCIÓN AGENTE, RECEPTIVA Y REPLICATIVA). El objeto recibe todos los caracteres hereditarios que tiene el agente; de aquí, el nombre de réplica que recibe el objeto, y el nombre de origen que recibe el agente. Así podemos afirmar que el Padre es origen del Hijo, el Padre y el Hijo son coorigen del Espíritu Santo, y el Espíritu Santo es fin o réplica.

La palabra gene posee el significado de contenido metafísico del ser: ${\textstyle S_{1}}$ es origen del gene, ${\textstyle S_{2}}$ es el gene y ${\textstyle S_{3}}$, a nivel HIPERNOÉTICO , es el fin del gene. Hace referencia, visto desde el modelo genético , a la concepción genética del sujeto absoluto. De este modo, todo lo que se dice de la Divinidad es: a nivel DIANOÉTICO, binitario; a nivel HIPERNOÉTICO, trinitario. Las tres personas divinas tienen que ver con el gene: el Padre [${\textstyle P_{1}}$] es origen del gene, el Hijo [${\textstyle P_{2}}$] es el gene, el Espíritu Santo [${\textstyle P_{3}}$] es el fin del gene. Las funciones de ${\textstyle P_{1}}$ en el modelo genético a nivel DIANOÉTICO son las siguientes: origen, ingénito, generante, acción agente, Padre, acción coagente con el Hijo.El Padre [${\textstyle P_{1}}$] tiene que ser origen ingénito y acción agente; el Hijo [${\textstyle P_{2}}$] tiene que ser fin engendrado por ${\textstyle P_{1}}$ y acción receptiva.

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