ACCIÓN AGENTE, RECEPTIVA Y REPLICATIVA

Se denomina acción agente a aquella que actúa sobre otra acción denominada acción receptiva con el objeto de definirla, constituirla y hacerla apta para la respuesta activa. Por ejemplo, en la siguiente oración ‘Pedro ama a Francisca’, la acción agente es Pedro, y la acción receptiva es Francisca. Lo mismo habría que decir de la acción del absoluto en el ser humano con el ser humano: la acción del absoluto es acción agente cuyo término es el ser humano que, a su vez, es acción receptiva. Para que se dé en el ser humano la respuesta activa se requiere el uso de la libertad. Si nos remitimos al ámbito DIANOÉTICO de la CONCEPCIÓN GENÉTICA DEL PRINCIPIO DE RELACIÓN , tenemos que el Padre [ ${\textstyle P_{1}}$ ] es acción agente y el Hijo [ ${\textstyle P_{2}}$ ] es acción receptiva en tal grado que las dos acciones constituyen el ACTO ABSOLUTO. En el ámbito hipernoético, tenemos que el ACTO ABSOLUTO está constituido por la acción agente del Padre en INMANENTE COMPLEMENTARIEDAD INTRÍNSECA con la acción receptiva del Hijo y la acción replicativa del Espíritu Santo.